Por naturaleza, una startup está en constante movimiento, cambio y aceleración en busca del crecimiento a corto plazo para sobrevivir en un mercado altamente competitivo. Es fundamental que estas empresas reciban la mayor cantidad de retroalimentación posible de clientes, stakeholders y expertos en su enfoque principal. Debido a la necesidad de adaptarse a los cambios del mercado y de los clientes de manera más ágil que las empresas tradicionales, contar con un Consejo Asesor puede marcar la diferencia.
Un Consejo Asesor es muy relevante dentro de una startup y generalmente se forma cuando la empresa está experimentando un rápido crecimiento. El objetivo de éste es agrupar un conjunto de expertos en áreas específicas que puedan ayudar a la empresa a detectar tendencias, obtener retroalimentación sobre sus productos y servicios, y mejorar el conocimiento de los clientes y la industria.
Tener un Consejo Asesor no significa que se pierda el control o la toma de decisiones en la empresa, sino que, se obtiene una asesoría para tomar decisiones más informadas y fundamentadas. La implementación de las recomendaciones puede ser flexible y adaptarse a las necesidades específicas de cada organización.
“Contar con un consejo asesor brinda una perspectiva fresca y valiosa gracias a la vasta experiencia que poseen. Nosotros en Pacto, siendo una empresa joven, reconocemos el valor de apoyarnos en este tipo de guía para aprovechar al máximo su conocimiento en la toma de decisiones futuras, para impulsar nuestro crecimiento en el mercado.” afirmó Rodrigo Kuri, Cofundador y CCO de la startup Pacto.
Busca a expertos multidisciplinarios de tu industria
Para asegurarte de que tu consejo asesor tenga un impacto significativo en tu empresa, es importante que busques a los mejores de la industria. Esto puede ser un proceso difícil, pero valdrá la pena en el largo plazo.
Al elegir a los miembros de tu consejo, busca aquellos que puedan aportar habilidades complementarias a las tuyas y que estén dispuestos a trabajar estrechamente con la startup para brindar retroalimentación y discutir estrategias que contribuyan al crecimiento, sus servicios y alianzas. Asimismo, un aspecto relevante es que estos especialistas sean independientes y no tengan intereses en la empresa para que sus valoraciones y opiniones sean objetivas.
“En nuestro caso, hicimos una investigación exhaustiva para identificar a los candidatos adecuados para el consejo asesor, buscamos líderes en el sector no solo en México, sino también en otros países donde soluciones similares ya funcionan bien. Hicimos todo para lograrlo y estamos muy satisfechos en tener dentro de nuestro consejo a líderes de la industria como Alejandra Ríos, CEO de Ambrosía y parte de Shark Tank México, Alejandro Carriedo, dueño de Lulo & Lala, Enrique Perret, CEO de US-Mexico Foundation y expertos globales como Brianna Keefe, CEO de Toastique y David Adelmant, VCP de Toast”, comentó Kuri.
El valor del Consejo Asesor en la toma de decisiones
Los consejeros actúan como mentores, ofreciendo distintas perspectivas y especialidades que pueden resultar útiles para la identificación de oportunidades de crecimiento, elaboración de estrategias de expansión y desarrollo de nuevas iniciativas empresariales, además pueden ofrecer una amplia red de contactos y acceso a espacios o recursos que de otra manera sería más complejo alcanzar.
Al ser multidisciplinarios, brindan una visión más amplia y completa del mercado, lo que permite abordar los problemas desde diferentes ángulos y puntos de vista. Con una perspectiva externa y habilidades específicas pueden ser de gran ayuda en momentos de incertidumbre o crisis, como pueden ser problemas financieros, cambios regulatorios, innovación tecnológica o la introducción a nuevos mercados.
Al contar con un consejo asesor, los fundadores no tendrán que enfrentarse solos a los desafíos que surgen en el camino, ya que pueden contar con el apoyo y asesoramiento de un grupo de personas con experiencia, lo que les permitirá tomar decisiones más informadas y minimizar el riesgo de cometer errores costosos.