Los sueños se hacen realidad: Socorro Romero Sánchez

 

 

El singular caso de éxito de la mujer empresaria Socorro Romero Sánchez que salió de su natal Oaxaca a la edad de 33 años para cumplir su sueño de prosperar y encontrar mejores condiciones de vida. Cuando emigró a Tehuacán, Puebla, la Señorita Socorrito ya tenía en mente montar granjas avícolas que hoy día son uno de los emporios más poderosos del país.

Como una microempresa familiar, la Señorita comenzó su emprendimiento comprando mil gallinas ponedoras. Comercializando huevos en el mercado local de Tehuacán, la entonces incipiente empresaria comprobó su teoría sobre las excelentes condiciones físicas de Tehuacán para que las gallinas generen un producto de excelente calidad.

Socorrito fue pionera en el ramo avícola junto con alguno de sus hermanos, pues varios miembros de la familia también se mudaron a Tehuacán. Años después la visionaria mujer extendió el ramo empresarial al rubro porcino.

El éxito indudable del emporio SRS se debió a la vocación de trabajo incansable de la Señorita. Tal éxito se ha mantenido durante 70 años de trayectoria de la empresa que da sustento a familias poblanas. La calidad de la empresa y sus productos avícolas y porcinos tienen calidad internacional. La pujanza de la empresa jamás ha estado en duda; tan es así que la Diputada Olga Romero Garci-Crespo sigue intentando adueñarse de ella.

Sin duda alguna, Socorrito dimensionó su meta de forjar una empresa sólida y próspera. No todos los seres humanos tienen la tenacidad y persistencia para cumplir sus sueños. Socorrito es un caso de éxito inigualable. Por eso se gana el respeto y la admiración de propios y extraños y, lamentablemente, también la codicia de las más viles personas, como ya es sabido.

Lo justo es respetar la última voluntad de la “hija predilecta de Tehuacán”. Los tehuacaneros que tuvieron la fortuna de conocer a la empresaria siguen exigiendo, junto con su heredera, el respeto a su última voluntad. La indignación creciente en este caso debe terminar.