México revisará a pedido de EUA posible negación de derechos sindicales en planta de VW

Autoridades mexicanas investigarán a pedido de Estados Unidos una posible violación de los derechos sindicales de trabajadores de una planta de la fabricante de automóviles Volkswagen, en el marco del acuerdo comercial de América del Norte, informó este martes el gobierno.

La Secretaría de Economía de México admitió una solicitud de la Oficina de la Representante Comercial estadounidense, recibida el pasado 28 de mayo, para revisar “una posible denegación de derechos de libertad de asociación y negociación colectiva” en la planta de Volkswagen de Cuautlancingo (estado de Puebla, centro), señaló el Ejecutivo en un comunicado.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social conducirá, en un plazo de 45 días, contados a partir de la fecha en que se recibió la solicitud, una revisión interna” para determinar si existe tal infracción, agregó la dependencia en el boletín, emitido conjuntamente con la Secretaría de Economía.

La revisión se da al amparo del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida, un anexo del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, T-MEC, que atiende las demandas de los trabajadores y resguarda las condiciones laborales de las industrias de los países miembros.

La solicitud de Washington surge a raíz de una denuncia enviada por trabajadores de la planta que fueron despedidos en represalia por realizar actividades sindicales, según un comunicado de la oficina comercial estadounidense del 28 de mayo.

“Estamos profundamente preocupados por las presuntas violaciones a la libertad sindical en la planta de Volkswagen en Puebla”, afirmó Katherine Tai, la representante comercial estadounidense, citada en el boletín.

Es la vigésimo tercera vez que Estados Unidos emplea este mecanismo y la quinta en lo que va de 2024, agregó la oficina comercial.

El sector automotriz es considerado una de las joyas de la corona de la industria mexicana y de América del Norte, cuyas cadena de suministros y fabricación están altamente integradas.

La creación de esta instancia de resolución de disputas fue un aspecto crítico de la negociación del T-MEC, tratado que reemplazó al antiguo TLCAN, con el que el gobierno del entonces presidente estadounidense Donald Trump (2017-2021) buscó subsanar lo que consideraba una competencia desigual en vista de los menores costos laborales de México.

Bajo circunstancias específicas, el mecanismo permite tomar medidas coercitivas cuando compañías de los países socios incumplen las leyes nacionales de libertad sindical y negociación colectiva.